domingo

Certeza de domingo

          Ninguna de mis acciones es trascendente. "Nadie es imprescindible"; yo tampoco. Mis acciones, mi imagen, mi presencia y mis motivos son esencialmente reemplazables por las acciones, la imagen, la presencia y los motivos de cualquier otro. El valor de mis acciones es el valor que se me ocurre que tienen. El valor de las acciones de los demás es el valor que se me ocurre que tienen. La emoción no trasciende. Da lo mismo una cosa que otra.