jueves

Una respuestita de mamá

          Mi mamá, que tiene un vínculo sado-masoquista con el psicópata de mi padre, es una de las pocas mujeres que conozco que desdeñan el instinto maternal a favor de la satisfacción de los deseos de su marido. En este caso particular, como los deseos de mi padre se relacionaban con mi desaparición, se dio el siguiente diálogo.

          Suena el teléfono. Atiendo con voz débil y cansada.

          -Hola

          -Hola, Pietro. Habla mamá.

          -Ah, qué tal.

          -¿Cómo estás?

          -Muy mal.

          -Y bueno... yo no puedo hacer nada.

          -Está bien, ya sabía.

          -Bueno, Pietro, chau.

          -Chau.

          No me lo vas a creer, pero pasó así. Yo a veces me debato entre que mi madre es una tarada o si en realidad no será que es una hija de mil puta.

viernes

¡BIENVENIDO TODA TU MIERDA A TODA TU MIERDA!

          Estoy contento porque había pasado el blog a una dirección de mierda, que era "todatuculpa.blogspot.com" para que alguna porquería no lo leyera más; después, como muchas veces en la vida -quizás llevado por mi debilidad o por el mandato paterno de fracasar-, me arrepentí y quise volver a la dirección anterior, pero el mismo camino oculto que me impidió millones de cosas en la vida también me impidió el regreso a la vieja dirección.

          Ahora, a no me acuerdo si tres o cuatro meses de la debacle luego de la cual experimenté la real sensación de que la porquería va a seguir siendo porquería irreversible y que su única vocación es construir mierda mientras tiene orgasmos viendo su obra (u olvidándola), ahora el sitio me permite reponer la dirección que pertenece desde hace casi dos años a este espacio, "todatumierda.blogspot.com".

          Y aunque el común del vulgo que ha elegido la degradación como motivo y razón de vida vaya prefiriendo la mierda de Facebook a los blogs, seguiré aquí dando patadas insuficientes, pero patadas al fin, contra los tremendos castillos de cemento durísimo que la porquería va edificando para perpetuar su orden horrible, y también contra las costumbres privadas de los que por elección deciden clara y voluntariamente hacer el mal o la perversión sabiendo que lo hacen, sólo porque les causa algún tipo de placer.

          Agárrense porque ahora sí que me va a chupar un huevo todo. Yo era un hombre bueno, y por culpa de la mayoría me salieron unas ojeras que me gustaría algún día hacérselas pagar. Hijos de puta, putas, decadentes de mierda, ojalá llegue el día en que los vea sufriendo por culpa de su propia soberbia, empantanados hasta las pelotas en el destino inmundo que eligieron mientras se cagaban de risa de los que seguían una vida digna; que la chapa de andar por ahí con el orto quebrado a sabiendas se les transforme en dolor; que la quilla peneana con la que van haciéndose camino espúreo se les transforme también, pero en lucidez de su propio valor.

          Sí, estoy resentido; pero la mayoría de ustedes está peor, está satisfecha, cuando no orgullosa.